Vestigios del trueno; cuando veinte años lo son todo

Muy al contrario, a lo que reza el morocho de Abasto en su canción, “Que veinte años, no es nada”. En el caso del poeta Neybis Bracho si lo son. Recientemente el poeta celebro sus primeros veinte años de carrera literaria. Veinte años, con igual cantidad de títulos publicados.

Se dicen rápido, e igualmente se escriben, sin embargo, no lo es, son veinte años de compromiso sostenido y dedicación a las letras, en especial a la poesía. Quedo atrás Glaciales, su primer poemario, y pareciera una broma, pero el nombre de aquel poemario quedo como testigo taciturno y silencioso; sus poemas quedaron esparcidos entre los misteriosos caminos que confluyen entre los dos paramos que protegen a la fría ciudad de Mérida, y la calurosa Carora. Poemas que atestiguan tempestades, como preámbulo a los Vestigios del trueno, el mas reciente poemario con el que Neybis celebra estos veinte años de triunfos.

Este vigésimo poemario es un canto al amor, y a la vida, a la esperanza, es un homenaje a la lucha sostenida del hombre y la mujer del Pueblo, los de a pie. Vestigios del trueno cuenta con la presentación del laureado Premio Nacional de Literatura Gabriel Jiménez Emán, y la portada es ilustrada con una obra maestra del artista plástico Benito Mieses. En fin, este vigésimo poemario es una joya, todo un tesoro.

El #fondodelsur se suma a esta celebración con esta edición de lujo, con diseño de Mariano Rosas, y edición de Eiro Rojas. El poemario forma parte de Los nuevos Encontrados*, linea de desarrollo destinada a la poesía.

*Encontrados en Ella, la ciudad cronopio.